Buenos Aires, 11 de junio.- El último fin de semana se los pudo ver a Alejandra Pradón y a Fabricio Lallana muy juntos.
Primero fue el sábado cuando los dos asistieron a un boliche de la Provincia de Buenos Aires. Pero además, el domingo estuvieron cenando en un conocido restó de Las Cañitas.
Los dos conversaron animadamente frente a los ojos de muchos ciudadanos sorprendidos. Luego se fueron al domicilio que la rubia tiene en Belgrano, el mismo que años atrás fue escenario del accidente de Alejandra que terminó con el cordobés preso, y después de tomar algo con la vedette, Fabricio partió hacia Córdoba, lugar dónde vive. Pradón y Lallana se siguen queriendo a pesar de todo lo que les tocó vivir.
Recordemos que el 15 de marzo de 2004, a la madrugada, Alejandra Pradón cayó al vacío desde el balcón del séptimo piso de su departamento y se salvó milagrosamente, pero la vedette terminó con fracturas en la cadera y vértebras y múltiples contusiones.
La vedette declaró en aquel momento a la policía que había sido empujada luego de una fuerte pelea con su pareja, Fabricio Lallana.
La noticia ocupó las primeras planas de los diarios y varias horas en la pantalla chica. Mientras Alejandra debió ser operada en varias oportunidades, Fabricio estaba en prisión preventiva por la causa de “tentativa de homicidio”.
El tiempo pasó y Lallana fue liberado en abril de 2004 por falta de pruebas. Por su parte, Pradón debió realizar una larga rehabilitación para poder volver a caminar.
Muchos años después, los dos vuelven a mostrarse juntos ante la mirada de curiosos y sorprendidos, que no pueden creer lo que ven luego de aquel escándalo que hizo hablar al país.
Esta tarde, la rubia pasó por el programa que conduce Jorge Rial por la pantalla de América y confió que con Lallana “sólo tienen sexo”. “Los dos estamos solteros, no quiero tener hijos con él, la pasamos bien y punto”, dijo la rubia vedette.
En tanto, confió cómo fue el encuentro: “Él me llamó porque estaba en Buenos Aires y vino al boliche donde yo estaba trabajando. Fuimos a comer y después terminamos en mi casa”.
