Una de las primeras manifestaciones del envejecimiento es la aparición de arrugas o surcos faciales. Lo ideal sería retrasar su aparición mediante la prevención y hábitos de vida saludables, pero una vez que han aparecido es posible suavizarlos mediante técnicas de relleno con polímeros.
Se trata de un método revolucionario no quirúrgico dentro de la estética médica, destinado a corregir deformidades del contorno facial sin cirugía, como arrugas, pliegues y cicatrices, o modelar o realizar el relleno de estructuras, como los labios y los pómulos.
La mayor ventaja que presentan es que permite lucir resultados sorprendentes, naturales y duraderos sin modificar la expresión del rostro.
Se aplica en surcos, arrugas, mentón, pómulos, relleno de labios, rellenos o bioplastías en la nariz, cicatrices, etcétera.
Dentro de los productos para este fin existen varias alternativas: con y sin colágeno, de duración permanente o temporaria y con y sin requerimiento de test de tolerancia previo. Incluso algunos contienen anestesia.
El método de relleno se lleva a cabo con anestesia local y consiste en aplicar el producto mediante inyecciones en las zonas faciales que lo requieran.
Se utilizan sustancias llamadas biopolímeros, que son biocompatibles, similares en textura y elasticidad al tejido conectivo del organismo, incluso algunas de ellas se usan desde hace años en otros tratamientos médicos como implantes odontológicos, prótesis óseas, suturas y reemplazos de arterias y válvulas en cirugía cardiovascular.
La duración de los rellenos varía en función del producto elegido. Pueden ser permanentes (no se reabsorben y permanecen definitivamente) o transitorios (6 meses a 1 año), según el paciente lo prefiera. Los realizados con "hidroxiapatita’ pueden tener una durabilidad transitoria pero larga y variable de 6 meses a 3 años, incluso más en ciertos casos.
El tratamiento es indoloro y demora menos de 15 minutos y el paciente puede reincorporarse de inmediato a sus actividades cotidianas. Los resultados buscados se ven en el momento, sin que medien vendajes.
La sustancia ideal de relleno debe contemplar los siguientes aspectos: no cancerígeno; no inmunogénico; no teratogénico; no migratorio (que no se desplace a otras partes del cuerpo); durable y de resultados predictibles.
Lo que resulta imprescindible es que esta técnica la realice exclusivamente un médico capacitado quien la aplicará respetando estrictamente las indicaciones del fabricante y las indicaciones de uso para las que ha sido aprobado por los entes reguladores.
Los efectos secundarios de los rellenos faciales en general ocurren inmediatamente después del tratamiento, para desaparecer en un lapso de 2 o 7 días. Las reacciones alérgicas agudas son de rara aparición (1 caso cada 2.000 pacientes). La formación de cicatriz hipertrófica es aún mas rara (2 casos cada 2.000 pacientes).
Las contraindicaciones dependen del tipo de sustancia a inyectar, pero a través de la consulta con el médico se decidirá cual es la más adecuada para evitar riesgos innecesarios o si es inviable la aplicación.
En esta consulta es importante que el paciente exponga lo siguiente:
-Si se han tenido severas reacciones alérgicas y/o historia de shock anafiláctico.
-Si se sufre alergia al colágeno bovino o a los huevos.
-Si se tiene alergia a la lidocaína.
-Si la piel está herida, inflamada, infectada o enrojecida.
-Si existe tendencia a formar queloides o cicatrices hipertróficas.
-Si hay problemas de coagulación o trastornos sanguíneos.
-Si se padece inflamaciones o infecciones como quistes, ganglios inflamados, granos, erupciones cutáneas, etcétera (en este caso se debe posponer el tratamiento hasta que se haya tratado y solucionado el problema).
-Si se está embarazada o amamantando.
-Si se es menor de 18 años.
Cuidados posteriores
* No se recomienda la toma de sol hasta 72 horas después de realizado el relleno.
* No utilizar antiinflamatorios no esteroideos u corticoides posteriores.
* El maquillaje no es aconsejable por el termino de 24 a 48 horas posteriores.
