Varios funcionarios entrerrianos presentaron ayer la renuncia tras la derrota electoral, mientras el presidente del Partido Justicialista, José Cáceres, denunció que algunos intendentes no trabajaron para la campaña electoral a favor del oficialismo en Entre Ríos. Según los últimos cómputos del escrutinio oficial, tres de las cinco bancas de diputados nacionales que se disputaron en los comicios legislativos quedaron en manos del Acuerdo Cívico y Social, una alianza opositora que postuló a dirigentes rurales. En ese marco, Cáceres también señaló que el conflicto durante 2008 entre el gobierno nacional y las entidades agropecuarias “influyó de manera considerable en el voto negativo al justicialismo, como una forma de castigar al gobierno nacional”. El Frente Justicialista perdió por algo más de tres mil votos -menos del uno por ciento- a manos del Acuerdo Cívico y Social.
