El municipio de Chimbas quiere poner nuevas reglas para la explotación en las ripieras que copan ambas márgenes del Río San Juan: pretenden modificar la actual legislación, que sólo las obliga a pagar una tasa fija anual de $1.200 -según la ordenanza 1.731 del año 2007- y lograr que el monto que tengan que abonar al municipio esté atado al volumen que mueven o a la facturación final. En el municipio no dieron detalles de porcentajes pero si admitieron que apuntan a multiplicar los ingresos en este rubro.
Fuentes calificadas del departamento estimaron que al año las 7 ripieras que tienen asiento en aquel lugar facturan $1,6 millones. Según la intendencia, "el dinero se utilizaría para remediar el daño que queda cuando termina la explotación".
Los minerales que comercializan estas empresas van desde ripio común, hasta arena lavada y piedra bola. Por día se cree que se mueven unas 40 camionadas, unos 200 m3 de material. Cada camionada -que tiene 5 m3- es vendida con flete incluido al Gran San Juan desde los $140 para el caso del ripio común y de hasta $250 para la arena fina.
"Lo de las regalías es muy difícil porque hay que modificar el Código Minero y eso debe hacerlo el Congreso. El problema es que es muy difícil de calcular porque habría que estar controlándolos al momento de la extracción. Estamos pensando en tomarnos de lo que pagan en concepto de ingresos brutos y de allí sacar un porcentaje", dijo ayer el intendente chimbero Mario Tello.
Las personas que se dedican a la explotación de áridos deben solicitar la concesión de áreas y el permiso dura unos 5 años, pero puede renovarse. Los terrenos en su mayoría son del estado y en ninguno de los casos la extracción de estos minerales debe modificar o perjudicar el normal cauce del río, sino es pasible de sanción por parte de la Policía Minera provincial y la Dirección de Minería.
"Realmente es muy complejo controlar a estas empresas. Lo que vamos a idear apunta en lo posible tener registros de cuánto volumen es el que comercializan. También evaluamos que la tasa dependa de las ganancias que registra la empresa y para ello tendríamos que dividir la tasa de comercio en categorías dependiendo de los valores que tenga cada una", aseguró el secretario de Hacienda municipal Fabián Acosta.
¿Por qué las empresas eligen a Chimbas? Los aridos que hay en ese departamento a orillas del Río San Juan son los preferidos por las constructoras locales por su calidad y baja salinidad: hay 5 ripieras tradicionales (venden áridos a particulares, empresas y ferreterías) y 2 más que lo extraído lo utilizan para hacer hormigón elaborado in situ o concretos asfálticos.
