Juan Román Riquelme, ídolo y referente de Boca Juniors, llegó minutos antes de las 15.30 al predio de Casa Amarilla, en donde el plantel xeneize arrancó ayer por la tarde la pretemporada de cara al próximo semestre, y se retiró a las 15.45, después de hablar con el entrenador Carlos Bianchi.
La expectativa por la presencia de Riquelme en la práctica de la víspera tiene vinculación directa con la finalización de su contrato, el lunes 30 de junio, en medio de una nueva polémica con el presidente del club, Daniel Angelici, quien días atrás dijo que el contrato estaba acordado “en un 90 por ciento”.
El talentoso enganche boquense llegó al mando de su camioneta, ingresó al vestuario del predio Pedro Pompilio, conversó brevemente con Bianchi, y se retiró.
En casos similares en la institución de la Ribera, los jugadores no comienzan la pretemporada cuando faltan pocos días para la finalización de sus contratos, debido a que en caso de alguna lesión en la práctica el club debería renovarles contrato en forma automática.
Por ese mismo motivo, ayer no participarán de la práctica Diego Rivero ni Claudio Riaño, quienes finalizan sus contratos el 30 de junio, y la dirigencia de Boca ya les avisó que no continuarán en el club.
El propio jugador, en sus últimas declaraciones públicas, adelantó que pertenece a Boca hasta el lunes y después de ese día, si no se llegara a un acuerdo, atenderá otras propuestas.
De todas maneras, en Boca se considera que antes de llegarse a ese límite, podrán limarse las diferencias que existen en cuanto a la cotización del dólar y Riquelme seguirá en la institución por 18 meses.
Los hinchas autoconvocados, menos que en ocasiones anteriores, pero muy ruidosos, se desplegaron por las calles Brandsen, Del Valle Iberlucea y también Espinoza (ingreso al estadio cubierto).
Las puertas del club permanecieron cerradas y con fuerte custodia policial, mientras los fanáticos, entre agitar de banderas y estallidos de bombas de estruendo, reiteraron los cánticos de apoyo al crack así como los insultos a la dirigencia.
El texto de la convocatoria que fue pegado en afiches en los negocios cercanos a la Bombonera, señalaba: “Viernes 27 de junio a partir de las 16.00 – Todos a la Bombonera – Como siempre, bancamos a Román. Andate Angelici. Renovación ya”.
Boca empezó a entrenar arrastrando viejas rencillas.
