Buenos Aires, 26 de mayo.- River Plate continuó en la noche de este domingo los festejos de su cumpleaños 112 y del 75º aniversario del Monumental al golear 3-0 a Atlético de Rafaela para clasificar a la Copa Sudamericana 2013 y alcanzar a Newell’s Old Boys en la punta del Torneo Final.
Al ambicioso equipo de Ramón Díaz le bastó con un soberbio capítulo inicial para liquidar el partido frente a un pálido adversario y poder volver a jugar en el próximo semestre una copa internacional después de cuatro años.
River marcó las claras diferencias en la primera etapa por intermedio de Leonel Vangioni, Eduardo Domínguez, en contra, y Carlos Luna, pero se destacaron más que las actuaciones individuales los aceitados movimientos que tuvieron los hombres ofensivos del conjunto ‘Millonario‘.
Rafaela, por su parte, dejó una pobre imagen en Núñez y, sin comprometerse en la tabla de promedios, sufrió un traspié que puede complicarlo en el futuro. A pura contundencia, River se adueñó del encuentro desde el comienzo y a los 14 minutos ya había marcado dos goles gestados por la vorágine y precisión del tándem ofensivo dispuesto por Díaz.
Cuando se jugaba el minuto 7, Vangioni enfiló al área en diagonal y sacó un tremendo bombazo cruzado que se metió al lado del palo izquierdo del arquero Guillermo Sara. River, tras el tanto, siguió presionando y fue por más, con Cristian Ledesma y Ariel Rojas manejando la pelota en el medio, con las permanentes subidas de Vangioni por izquierda y con un Manuel Lanzini suelto e impredecible para los defensores contrarios.
Así, a los 14, tras un lateral por el sector izquierdo, Rogelio Funes Mori le bajó la pelota a Rojas, el ex Godoy Cruz tiró el centro al área y Domínguez conectó para marcar en contra de su propia valla. Rafaela sintió el golpe y pese a alguna aproximación con tiros desde lejos nunca hizo pie en el medio, viéndose desbordado por completo.
Con espacios y movilidad, River llegó permanentemente y volvió a gritar a los 31 por un cabezazo de Luna, tras un centro desde la derecha de Lanzini. River cerró de esta manera un primer tiempo perfecto y sus exaltados simpatizantes se lo reconocieron con una lluvia de aplausos, camino al vestuario.
El segundo período estuvo de más: River no se desordenó, apostó al toque para hacer pasar los minutos y, aunque no llegó con frecuencia al arco del oponente, tampoco sufrió sofocones. La única chance que tuvo la visita se dio a los 26 minutos, con un mano a mano que Marcelo Barovero le tapó al ingresado Lucas Albertengo. River contestó recién a los 40 con una maniobra del uruguayo Rodrigo Mora que terminó salvando milagrosamente Sara.
River construyó así una nueva victoria en el Monumental que alimenta, a sólo cuatro fechas del final del certamen, el sueño de quedarse con el campeonato.
