Buenos Aires, 21 de mayo.- Bajo el lema "River vuelve a ser River" el "Millonario" no se privó de nada para festejar su trigésimo quinto campeonato doméstico. El exultante Mariano Iúdica se encargó de presentar a cada uno de los protagonistas, que bajaron del micro descapotable cantando las habituales estrofas de la "Banda".



Desde un costado, con una sonrisa imborrable, Alejandro Domínguez disfrutó del éxito de sus ex compañeros. "Seguí la campaña a pesar de la diferencia horaria. Hoy me da nostalgia ver a River, por ahora tengo contrato por un año más en el Olympiacos y después veremos. Yo me quiero retirar acá, ojalá en algún momento pueda volver" destacó el "Chori".



Desde otro rincón del imponente salón, el "Beto" Alonso también reconoció la hazaña de los jugadores: "Fuimos los justos ganadores. No sólo conseguimos los tres puntos en la Bombonera, sino que a Boca le venimos ganando desde el verano". Además, uno de los máximos ídolos del club le dedicó el triunfo a su público: "Hay que dedicarle este campeonato a toda la gente, que sufrió mucho durante tanto tiempo. Igualmente, los socios saben que se equivocaron mucho".



Naturalmente, la fiesta fue exclusiva de los futbolistas. La humildad de la dirigencia, compuesta por sus principales conductores, Rodolfo D’Onofrio, Jorge Brito y Antonio Patanian llevó a que el reconocimiento sea exclusivo para los campeones del Torneo Final.



"Oy oy oy, oy oy oy, es el equipo de Ramón" se escuchaba desde las mesas, y el entrenador habló: "Lo único que necesité hacer es acompañar al grupo. Dimos una demostración de que se pueden hacer cosas grandes pensando en positivo. El mérito es de los jugadores". La imagen del presidente del club, brindándole la Copa a su capitán, Fernando Cavenaghi ejemplificó el agradecimiento hacia un plantel que volvió a poner a River en el lugar que se merecía.