“Estoy podrido de que (los árbitros) nos sigan perjudicando. No abrí la boca después de lo que nos hizo (Cristian) Faraoni contra San Lorenzo, pero esto de Abal ya supera todo lo que uno puede imaginarse”. “Lamentablemente el fútbol es un negocio y tienen que buscar la forma de que los equipos grandes ganen, porque ustedes vieron lo que pasó el año pasado cuando les fue mal a los poderosos: hasta hubo que parar los torneos”.
