El haberse ausentado de la casa por sólo tres horas, le costó 10.000 pesos y otras cosas a una familia. En ese lapso en que la pareja andaba haciendo compras, delincuentes entraron a su domicilio ubicado a pocas cuadras del centro capitalino. Les robaron el dinero que tenían ahorrado, además artefactos electrónicos y hasta las zapatillas y zapatos.
Lo llamativo del robo que sufrieron Oscar Cuevas y su mujer Cintia es que no rompieron ninguna de las cerraduras de su casa en calle Tucumán, entre Maipú y Pedro Echagüe, en jurisdicción de la Seccional 2da. Cuando regresaron a eso de las 20 del jueves, y se encontraron con que estaba abierta la puerta que comunica la cocina con el patio. "O nos olvidamos y dejamos esa puerta sin llave, o los ladrones traían una copia de la llave u otra cosa para abrirla sin violencia. Me llama la atención, porque siempre dejo aseguradas las puertas", dijo Cintia, la dueña de casa.
La mujer junto a su marido y su nene salieron alrededor de las 17 del jueves para hacer algunas compras. El otro hijo de Cuevas, también estaba afuera, de modo que no quedó nadie en la casa.
"Lo que me resulta extraño es que fueron directamente a mi dormitorio, donde tenía el dinero que venía ahorrando desde el año pasado para un viaje y para pagar la universidad", expresó Cintia, en referencia que sólo revisaron el dormitorio de la pareja. Los 10.000 pesos fueron sustraídos de una pequeña caja que la mujer guardaba en su cómoda. De la pieza también sacaron una cámara digital, un celular, todos los calzados de la pareja. De otro lugar se llevaron una notebook. El resto de la casa no presentaba desorden y tampoco se notaban faltantes, pese a que había muchos artefactos.