En apenas media hora, el futuro de Roberval con San Martín quedó resuelto, por lo menos por los próximos 30 días. Es que en ese lapso de tiempo el brasileño ingresó al club, retiró sus pertenencias, luego tuvo la charla con los dirigentes, para por último retirarse del Hilario Sánchez envuelto en lágrimas, ya que tras contar el diálogo que tuvo con los dos vicepresidentes, se quebró. De esta manera el brasileño, que tuvo una pelea el martes con Pablo Cantero y tras ella contó que en un 99% estaba fuera de San Martín, ayer por la tarde ese 1% se tradujo en la continuidad por un mes más, que es lo que le propusieron dado que no le aceptaron la rescisión de contrato que el delantero pidió. En ese lapso, el club le pondrá un entrenador particular y un psicólogo, por lo que no compartirá más camarín con el plantel de Primera.

Roberval tiene contrato hasta junio de 2013, tal cual lo confirmó el mismo protagonista, quien pidió rescindirlo. Ayer, sobre las 19 llegó al club, luego de no haberse presentado al entrenamiento matutino, y en la secretaría se reunió con los vices Roberto Petrignani y Pablo Slavutsky ante la ausencia de Jorge Miadosqui. A los 15 minutos salió, se subió a su auto y vidrio de por medio contó detalles de la reunión. “Los dirigentes me pidieron que venga porque querían hablar conmigo. Yo les dije que lo mejor era no estar más acá porque no tengo más cabeza para jugar y me propusieron que siga hasta junio, así que el lunes empiezo a entrenar aparte con un profe y me van a poner un psicólogo, porque no quiero más contacto con el plantel. Sé que esto es por mi carácter y temperamento”, contó el moreno.

Roberval aceptó la propuesta de los dirigentes, pero ya tiene decidido que no se extenderá más de eso. “Yo me quiero ir. Les pedí rescindir el contrato y ellos no aceptaron. Ahora estaré hasta junio y ahí veremos dónde me voy a jugar, pero confío en poder volver alguna vez”, agregó.

El momento cumbre fue cuando destacó el apoyo que siempre tuvo de los hinchas y el club. “Me crié acá y no esperaba esta despedida. Petrignani en como mi papá, y Slavutsky y Miadosqui siempre me apoyaron, por eso me duele mucho este momento”, para luego quebrarse, llorar y expresar el duro e impensado momento que atraviesa.