Buenos Aires.- Carlos, el ‘Angel de la muerte’, Robledo Puch, es el asesino múltiple más sanguinario de nuestra historia criminal y además, el único preso argentino que pasó más tiempo en la cárcel que en libertad. Preso desde los 20 años por 11 homicidios, pide incansablemente desde el 2000 que le otorguen el beneficio de la condicional y, sistemáticamente también, se la niegan.
Sin embargo hoy, al menos por unas horas, será libre y su sueño se hará realidad. Lo trasladarán desde el penal de Sierra Chica, donde está alojado desde hace 44 años, hasta San Isidro, donde le harán estudios médicos.
En febrero, en un escrito que le hizo llegar a la gobernadora María Eugenia Vidal, le manifestó que sufre asma y EPOC, cuadro que reafirmó su abogado, José María Villada, cuando aseguró que en la cárcel no recibe el tratamiento adecuado.
Puch fue condenado a reclusión perpetua, más la pena accesoria de reclusión por tiempo indeterminado, por 10 homicidios calificados, un homicidio simple, una tentativa de homicidio, 17 robos, una violación, una tentativa de violación, un abuso deshonesto, dos hurtos y dos raptos.
