Rubia, modelo y charrúa, Andrea Ghidone hizo de todo para cruzar el charco y anclar en la pista de Bailando por un sueño para hacer patria: desfiló con una micro tanga en el Nuevo Gasómetro de San Lorenzo y frente a la hinchada -para cumplir su promesa de desnudarse si Tinelli la convocaba-, se agarró casi de las mechas con Amalia Granata, piantó lagrimón al mostrar a su pequeña hija y hasta se involucró en la batalla entre Matías Alé y Silvina Escudero, pero eso no era suficiente para brillar. Ahora, la blonda transita un romance televisivo con Jorge Dáscola, el managger de Fabio "La Mole" Moli que todas las noches acompaña al púgil en los estudios.
Ella quería su novela en tiempo real…y la tuvo. Todo llega a la pista "cupida" del Bailando, hasta ella encontró su (gran) media naranja.
Tocada por la varita descubre talentos de Marcelo, la Cenicienta se convirtió en princesa. Con tal de ganar tiempo de aire (y jugosos contratos de teatro, por supuesto…), la Ghidone no tiene problemas en prestarse al juego.
Con su mejor sonrisa de Barbie y ojitos de Julieta enamorada, bailó lentos en una baldosa con la robusta masa empresaria que sueña ser su Romeo, hasta recreó la desopilante caída del sofá que tuvo el representado de su candidato.
En un segundo de fama, decidió tirarse a la pileta. Al parecer, el deseo de la chica -a quien no le perdonan la edad en los pasillos de Ideas del Sur, donde se ganó apodos como "Pendevieja", "Limítrofe apestosa" y "Andrea Gastada", según Intrusos- es estirar esa porción de tiempo a cualquier precio, ya que el romance en TV es "cash" puro para el circo tinelliano.
"Dáscola me llama todo el tiempo" confesó la participante en Este es el show, el programa que conduce José María Listorti, donde reveló que recibe llamados de su pretendiente cordobés hasta dos o tres veces por día.
Que le da "ternura", es lo que dice ella. Claro que, en esa ronda de histeria amorosa, hay intereses en juego.
Después de colgar sus curvas perfectamente trabajadas en revistas de alto tenor erótico como Maxim y Hombre; la muchacha que este verano será una Bravíssima junto a Cármen Barbieri, se las trae y ya mostró garras de plumífera contrincante para las vedettes made in Argentina.
