Entrenar seis días a la semana, de los cuales dos son en doble turno, sumado a las escasas juntadas con sus amigos, requieren de un esfuerzo importante para Gerónimo Maldonado, un nadador de 12 años que aspira a llegar lejos porque su talento lo acredita. Este alumno de la escuela Pérez Hernández es un apasionado de la natación, pero antes la combinaba jugando al fútbol con sus amigos, hasta que un día se frustró en un torneo y decidió dedicarse de lleno al deporte acuático. ‘Me encanta nadar, por eso le aporto mucho tiempo y esfuerzo, al igual que mis padres que realizan un sacrificio paralelo’, expresó el pequeño delfín que practica todos los días en la tarde y que los miércoles, además, se levanta a las 4:20 para tirarse al agua a las 5 en Aquatic Center y, desde ahí, asistir a la escuela. Los sábados también entrena mañana y tarde, por eso el último día de la semana en la noche trata de no juntarse a cenar o ver películas con sus compañeros porque sino después no cumple con su objetivo, que es sumar la mayor cantidad de metros posibles al más alto nivel.
Gerónimo ya tiene en su haber primeros puestos en Infantiles 2 y Menor 1 en la Copa Italia, un título en Mendoza en Menor 2 y también excelentes resultados en el campeonato nacional. Allí, en febrero pasado, fue tercero en los 1.500 metros libres y cuarto en estilo pecho en los 100, 200 y 400 metros. Este verdadero pichón de crack, que sueña con competir en los Juegos Olímpicos, tiene como referente a Felipe Vargas, quien lo aconseja constantemente y lo alienta diciéndole que ‘tiene mucha técnica’.
