Debido a que se prevé excedentes de vinos en Mendoza para la próxima temporada y que afectará nuevamente a la región, el Gobierno sanjuanino ideó una propuesta para tratar de reducir la cantidad. El plan local consiste en buscar un nuevo acuerdo del mosto, ya que, a diferencia de lo que pasa en estas tierras, en la vecina provincia no se respeta el porcentaje pactado de elaboración de ese producto y se termina engordando el stock vínico que deprime los precios. Por eso, la idea es obligar a los bodegueros y productores a que destinen las uvas comunes, como cerezas y criollas, a mosto y se prohíba su uso para la elaboración de vinos. De concretarse, la medida impactaría de lleno en suelo mendocino, dado que allí se hacen caldos con esas variedades, como los 108 millones de litros de este año, mientras que en San Juan no se vinifica nada con esas uvas, según los datos del Ministerio de la Producción. Si las provincias llegaran a suscribir la idea sanjuanina, sería un pacto inédito en la historia de esta industria.

Si se hubiera aplicado el mecanismo este año, según previsiones oficiales, se habría eliminado la mitad del sobrestock de 300 millones de litros de vino. Y en el caso de que se pusiera en marcha para la próxima temporada, se sacarían más de 100 millones de litros que engrosarían un excedente que puede girar en torno a los 200 millones. Este año, la región atravesó una dura crisis vitivinícola por ese motivo, y entre las causas principales aparece el repetido incumplimiento del acuerdo del mosto por parte de Mendoza, de acuerdo a la visión del Gobierno local y de los actores vitivinícolas.

La propuesta local la dio a conocer el ministro de Producción, Marcelo Alós, quien manifestó que se trata de "un aporte que nos parece viable, que hay que discutirlo, mejorarlo o implementarlo tal cual lo planteamos" y que "si no hacemos nada, vamos a estar muy complicados el año que viene. Por eso, nos parece que es urgente poner el tema en la agenda".

DIARIO DE CUYO consultó el tema con el ministro de Agricultura de la Nación, Carlos Casamiquela, durante su visita a la provincia la semana pasada, quien se mostró de acuerdo con el espíritu del proyecto. "Hay que mejorar la calidad de lo que vamos a vender al mercado externo o interno y trabajemos con el mosto con uvas de menor calidad", dijo. Sin embargo, no se mostró partidario de la prohibición, ya que el Ejecutivo nacional apuesta a "fomentar alternativas que no alienten el cultivo de uvas comunes". Dichas estrategias se encuentran en etapa de diseño, según manifestó.

Alós dijo que de concretarse la propuesta, se plasmaría en el acuerdo entre San Juan y Mendoza, el cual empieza a discutirse en diciembre y termina aprobándose en febrero.