La organización de la competencia se mostró satisfecha porque no hubo heridos en la carrera. Antes de la largada, se les aclaró a los corredores que debían completar el recorrido respetando las señales de tránsito, ya que no se cortaron calles entre las diferentes postas. Los más precavidos fueron los papás, que llevaron a los chicos siempre por la vereda.
