Se preparan desde niños para servir. Los valores son parte fundamental de su enseñanza. Pero para llegar a ser un scout completo deben pasar por cada una de las secciones (categorías). Ellas son: lobatos, scout, caminante y rover. En cada una, la educación y la solidaridad van de la mano de los juegos y los emprendimientos. El pasado 5 de septiembre fue el día de los scouts, por esto ayer festejaron en Marquesado.
Para iniciarlos en el grupo, los más pequeños ingresan a la sección lobatos. Organizados en manadas y a través de juegos de obstáculos aprenden a compartir y ayudar a sus compañeros. Tienen entre 7 a 10 años y su enseñanza está basada en el Libro de las Tierras Vírgenes (o libro de la Selva), que plantean lecciones morales. Su lema es ’Siempre mejor’.
Después de esto entran en los scouts. En este eslabón se fomenta el trabajo en grupo, por lo que los jóvenes de 10 a 14 años forman patrullas de trabajo y eligen los líderes. El lema de ellos es ’siempre listo’. En estas 2 secciones los niños siguen las indicaciones y las ideas que plantea el dirigente que los guía.
Ya pensando en el futuro los chicos de hasta 17 años pasan a ser caminantes. Deben buscar su independencia económica para financiar las actividades que se desarrollan dentro del grupo. Es por esto que forman pequeñas empresas a través de las cuales hacen empanadas, galletitas y otras cosas para recaudar fondos. Al igual que los scouts el grito es ’siempre listo’. En el último eslabón, los jóvenes de hasta 21 años comienzan a ser rover. En esta etapa los proyectos para servir a los demás son la parte fundamental. En este eslabón los rovers organizan y encabezan las actividades solidarias. Es por esto que su lema es ’siempre listo para servir’. En la provincia hay 18 grupos y hay más de 700 jóvenes adheridos a los scout. Es que este movimiento se triplicó en los últimos 10 años, según Alberto Lara representante de la Zona San Juan.
