La Justicia Federal Electoral finalizó ayer la carga de los datos del escrutinio definitivo y el resultado parcial que más había llamado la atención en toda la provincia quedó confirmado: los precandidatos a intendente, diputado departamental y concejales de la Nueva Izquierda en Ullum no sumaron votos en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO). Al principio se creía que era un error, pero en el recuento no aparecieron sufragios para ellos y la cúpula partidaria no hizo ningún planteo objetando la cuestión. De esta forma, se quedaron afuera de la general por no alcanzar el mínimo de apoyo popular.

“Es algo que no se condice con lo que pasó, evidentemente nos sacaron los votos”, se quejó la presidenta de la Nueva Izquierda y candidata a gobernadora, Mary Garrido. Por otra parte, explicó que no reclamaron ante las autoridades electorales porque “piden pruebas concretas y nosotros no pudimos fiscalizar en todos lados, no tenía sentido presentar algo”.

La sorpresa reinó cuando el recuento provisorio reveló que que los postulantes a intendente, Hilario Molina; a diputado departamental, Plácido Molina, y a concejales no cosecharon respaldos. Sucede que de ese resultado se deduce que ni ellos mismos se votaron o que dio la casualidad que sus sufragios fueron nulos por alguna irregularidad. “No puede ser”, dijo escéptica Garrido.

Desde varias fuerzas entendían que se trataba de un error, que las autoridades de mesa se equivocaron al llenar los telegramas y que los casilleros de Molina y sus compañeros quedaron en blanco. Es más, eso pasó en otros distritos, se detectó en el recuento definitivo y se corrigió.

Pero en el caso de Ullum no fue así. En el conteo final se verificó que en los telegramas constaba lo mismo que en las actas de las mesas dispuestas para el 9 de agosto. Podría decirse que es una situación inédita, ya que en la Justicia Electoral no recuerdan que algún candidato no haya sacado votos en el distrito donde se ponía a consideración de la gente (si se dio que en algunas mesas sume 0).

Un dato no menor es que la Nueva Izquierda tampoco obtuvo sufragios en Ullum en las otras categorías. Según las cifras oficiales, también figuran con 0.

Da la casualidad que el partido que lidera Garrido protagonizó una polémica en ese distrito en la previa. Anotó como precandidatos a intendente y diputado departamental a Leonardo Salinas y su mujer, María Eraso, quienes salieron a denunciar que los estaban usando. Dijeron que los engañaron, que no militan en política y que nunca dieron su consentimiento. La Nueva Izquierda tuvo que salir a último momento a cambiar los nombres.