El día clave para la demanda de algunos sectores sindicales de ir un paro general empezó ayer con una afirmación contundente de Juan Carlos Schmid, uno de los integrantes del triunvirato que conduce la CGT, que de inmediato saltó a cima de los portales digitales y los canales de noticias: ‘El paro de 24 horas está decidido, solo falta ponerle la fecha‘. Schmid hizo esta afirmación antes de ingresar a la sede de la CGT en Azopardo 802 donde el Comité Central Confederal de la Central obrera se reunirá para definir el primer paro nacional contra el Gobierno de Mauricio Macri. Pero, con el transcurrir de las horas la manifestación de Schmid se fue diluyendo y aunque el Comité Central Confederal (CCC) de la CGT facultó ayer al flamante consejo directivo de la central obrera a adoptar todas ‘las medidas de fuerza que sean necesarias cuando lo considere oportuno‘,
no se definió cuándo. Osea, que después de tres horas arduas y de duro debate, se impuso la posición de las organizaciones gremiales que aún procuran un acuerdo con el gobierno nacional a través del diálogo.
Por esas horas, ya terminada la tarde, la afirmación tempranera de Schmid sobre que ‘el paro ya estaba decidido’ se acercaba más al bloopper que a la realidad que planteaba la tensa reunión sindical.
En una conferencia de prensa, los integrantes del triunvirato Juan Carlos Schmid, Héctor Daer y Carlos Acuña, aseguraron que durante las deliberaciones hubo ‘posturas diversas y un profundo debate‘, e informaron que se eligió el Comité Arbitral, que dirime los conflictos intersindicales
Daer sostuvo que ‘se debatió la realidad política y económica por la que atraviesan los trabajadores a partir de un informe de Schmid‘, en tanto señaló que hablaron más de 30 congresales en ‘un debate enriquecedor‘ y se coincidió totalmente en el diagnóstico: ‘El gobierno decidió transferir grandes recursos a varios sectores concentrados y aumentó las tarifas de los servicios, mientras cayó el salario y continúa el proceso inflacionario, que deterioró el poder adquisitivo de los trabajadores y jubilados y maltrató la economía de quienes cumplen tareas en la informalidad‘.
El debate fue amplio, pero finalmente se facultó al triunvirato a continuar las gestiones y el diálogo con el poder político y a conformar alianzas con distintos sectores de la sociedad, como a decidir protestas si no se logran ‘respuestas positivas‘.
Para Daer, el paro es un instrumento que será analizado en el momento oportuno y luego de evaluar la reunión del próximo jueves con el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, y con el resto de los funcionarios y sectores predispuestos al diálogo.
El dirigente del gremio de la sanidad negó que haya habido una convocatoria al diálogo por parte del presidente Mauricio Macri. Por su parte, Schmid, quien horas antes había anticipado el paro, subrayó que ‘la fecha de un paro -si finalmente se decide- será fijada por el triunvirato luego de un acabado análisis y no se anunciará en ‘un set televisivo ni en una conferencia de prensa‘, porque ello es ‘una estrategia de la CGT‘.
En el debate hubo distintas posiciones y discusiones, como las que plantearon bancarios, gráficos bonaerenses, ladrilleros, docentes privados y camioneros, entre 11 gremios, que reclamaron un paro.
‘Hay que atenerse a los hechos. Luego de la ronda de diálogo se tendrán más precisiones. La CGT recorrerá todos los estamentos del Ejecutivo y de los sectores empresarios‘, aseguró Schmid.
Para Acuña, ‘el movimiento obrero tiene la prudencia lógica que debe guiarlo, por lo que las respuestas debe ofrecerlas el Gobierno‘, aunque aseguró que ‘los trabajadores no están conformes con la situación y la realidad por la que atraviesan y, el Presidente, debe saber que solo es aplaudido en el extranjero‘.
Schmid negó que el movimiento obrero haya acordado una tregua con Macri y reseñó que la CGT y el resto de las centrales obreras ya promovieron y realizaron la primer gran movilización en abril último.
‘De haber una huelga nacional, será de 24 horas y sin movilización’, aseveraron ayer los integrantes del triunvirato obrero.
