Los primeros testimonios de los penitenciarios de la guardia implicada en el escandaloso caso de fuga del sector de máxima seguridad, apuntaron a reforzar una presunta negligencia: “Algunos dijeron que cabeceaban o dormitaban cuando se produjo la evasión”, reveló ayer una fuente del caso. Así, se pusieron lejos de los dardos de Fernández que habla de una facilitación a propósito por parte de los empleados de la cárcel. Por lo bajo, otros guardias intentan una explicación a ese presunto comportamiento: “es normal dormirse porque te recargan todo el tiempo”, dijo uno de ellos.