Anoche a última hora el presidente de Unión, Luis Guardia, y el de Trinidad, Alberto Platero, habían llegado a un acuerdo para jugar el clásico con público visitante, pero la Policía elevó una nota a la Liga Sanjuanina afirmando que ya habían armado el operativo con público local para evitar incidentes.

Ante eso todo quedó en suspenso y recién hoy al mediodía se sabrá si el clásico entre Unión y Trinidad por la fase final del Argentino B se jugará con público local solamente o con ambas hinchadas. Lo confirmado es que el partido será el domingo a las 19, todavía no se sabe si Unión podrá hacer de local en su estadio, ya que el árbitro que lo dirigió con San Martín de Mendoza, el cordobés Pablo González, elevó un informe dejando constancia que habían muchos escombros en los alrededores de las tribunas. Es por eso que hoy un inspector de la Liga evaluará si el ’12 de Octubre’ está en condiciones o no. De no ser así, el Azul tendrá que buscar otra cancha para jugar.

En un principio Guardia quería que se jugara solamente con público local y Platero, con ambas parcialidades. Es más, el titular de Trinidad también mencionó como una opción jugar en San Martín. Anoche se reunieron los dirigentes y se pusieron de acuerdo en jugar con ambas hinchadas y que cada institución se haga cargo de los eventuales daños que se produjeran en su estadio. Parecía todo encaminado a eso, pero ahora la Policía local, y el informe del árbitro, determinarán hoy si habrá o no duelo de hinchadas en la cancha.