Corría el verano de 2002. Sebastián González (28 años) y unos amigos de la cuadra decidieron hacer alguna actividad relacionada con el baile. En la unión vecinal del barrio Los Pinos (Chimbas) justo comenzaban las clases de folklore y para pasar un buen momento los chicos se anotaron, aunque para la mayoría fue un hobby. Actualmente, el único que sigue es Sebastián, quien tomó clases por distintos institutos de la provincia, a lo que fue incorporando estudios de flamenco y danzas contemporáneas.
Con una beca que le surgió luego de participar en tres ediciones de la Fiesta del Sol, este bailarín llegó a ser el único de San Juan en ser seleccionado para formar parte del Ballet del Festival Nacional de Folclore de Cosquín.
Instalado todo enero en Córdoba y tras bailar en la fiesta mayor de San Juan, también participó de la Fiesta de la Vendimia de Mendoza.
"Me gusta todo tipo de bailes, pero reconozco que mi fuerte es el folclore, y a la vez es lo que me hace salir de la provincia’ manifestó Seba, a quien -en paralelo con su carrera artística- le quedan muy pocas materias para recibirse de arquitecto, pero que tiene en claro que su objetivo es continuar bailando y estudiar en alguna academia de Buenos Aires.