Durante los dos días de deliberación de la Comisión Permanente del Episcopado argentino, la Iglesia advirtió ayer que la paz social “está alterada” y reiteró su preocupación por “el clima de conflicto” permanente que vive el país con el paro del campo y la inseguridad. “Hay mucha preocupación, la paz social está alterada”, subrayó el vocero episcopal, presbítero Jorge Oesterheld. El portavoz reiteró que “el clima de conflicto” y la falta de seguridad son motivo de “preocupación permanente entre los obispos”. Durante el encuentro, los prelados también trataron el adelanto de las elecciones, que “no fue bien recibida” en la Iglesia, porque consideraron que la decisión “no pretende resguardar la institucionalidad del país”. También, se refirieron a la participación del sacerdote Guillermo Marcó, ex vocero del cardenal Bergoglio, en la reciente marcha contra la inseguridad, la que causó malestar entre ciertos obispos. No obstante, el temario oficial incluyó el estudio sobre el Documento de Aparecida y las acciones para llevar adelante la Misión Continental en cada diócesis.
