Cuando terminó la prueba, nadie se fue del lugar esperando los regalos, que fueron sorteados. Es que hubo 20 bicicletas y 11 computadoras disponibles, por lo que varios atletas y escuelas se fueron con un premio bajo el brazo, en un cierre que tuvo un show de música en vivo. Pero además, entregaron 500 pelotas (de fútbol, vóley y básquet) a las más de 200 escuelas que tomaron parte del maratón.
Cada participante recibió un número al momento de inscribirse y una vez que llegaron a meta despegaron un troquel que dejaron en diferentes urnas. Los directivos de las escuelas, en tanto, depositaron un formulario con los datos de las instituciones. Las computadoras se sortearon entre el público, los participantes y por primera vez también entre los profesores de Educación Física, como un estímulo por llevar y acompañar a sus alumnos. Las bicicletas, en tanto, fueron exclusivamente para sortear entre los atletas. Los premios fueron aportados por la Municipalidad de la Capital y por diferentes empresas que colaboraron con la prueba.
La muestra de que muy pocos se fueron tras el final de maratón es que casi todos los sorteados estuvieron presentes y el clásico conteo de ‘A la 1, 2 y 3’ si no aparecía el favorecido quedó trunco en varias ocasiones.
Por otro lado, el paréntesis en el cierre fue el regalo que el intendente Marcelo Lima realizó a la escuela Juan Ignacio Gorritti, de La Chimbera, 25 de Mayo, que sufrió daños tras las lluvias de verano. Por el gesto de haber viajado tantos kilómetros se llevó una PC completa.
En tanto, la organización cuidó todos los detalles. Hubo una gran mesa de abastecimiento de agua, dispusieron de dos ambulancias y hasta la Sociedad de Cardiología realizó mediciones de monóxido de carbono en sangre.