Descalza. Apenas asentando el pie derecho pero dispuesta a bajarse y subirse una y mil veces de la camioneta para saludar a todos y cada uno de los astiqueños. Los conoce a todos y a todos les agradece. Es más, entre lágrimas, Viviana Chávez regresó a Valle Fértil y en Astica hizo el balance de su paso por los Juegos Olímpicos de Río. Simple, frontal, agradecida. No se guardó nada y habló de todo.
‘La verdad que no hay nada para reprocharse. Soy feliz, inmensamente feliz. Estar en un Juego Olímpico es algo increíble y creo que me costó demasiado, más de lo pensado, el cierre de los 42 km. Estaba más que bien preparada y creo que el calor no era pretexto porque en Marruecos entrené con calor también pero la fascitis plantar y ese espolón me empezaron a maltratar. Con mi entrenador especulamos que el dolor recién iba a arreciar pasando los 20 o 25 km pero a los 15km, ya me atacó mal y no podía. En el último puesto de hidratación, fue todo psicología porque me acordé a Astica, de mi gente, de San Juan y juro que corrí sin piernas. Pero dejé todo. Llegué digna y no puedo reclamarme nada. Fue una preparación como quería y esto es experiencia para ver que a futuro se deben mejorar detalles nada más’, abrió Viviana tras la locura que fue reencontrarse con su gente primero en el Aeropuerto Sarmiento y luego en Chucuma y Astica.
Pero siguió el momento del análisis, del balance, de las observaciones y en eso, Viviana es más que estricta con ella misma: ‘Quería más. Yo iba preparada para ser la mejor de las argentinas y se me complicó por eso, hay algo de molestia muy íntima pero sé que les cumplí a todos los que confiaron en mí. Empezando por mi profe Julio Díaz, que fue mi descubridor, después al municipio que me ayudó desde que clasifiqué y antes también. La Secretaría de Deportes estuvo conmigo y me respaldó con todo al igual que AOMA y Fila que estuvieron a mi disposición. El balance creo que es bueno en todo sentido más allá de la posición final pero correr un maratón olímpico no es para cualquiera y yo tuve ese enorme privilegio’.
De cara al futuro, después de tratar esa lesión y de descansar el físico tras tanto trajín y entrenamiento, Viviana ya empezó a planear el Mundial de Atletismo de 2017 que se realizará en Londres. Queda mucho y poco a la vez pero es el primer objetivo a la vista más allá de las innumerables invitaciones a varias carreras en todo Argentina: ‘Hay que mirar a Londres y ese será el próximo paso. No es sencillo porque está lo mejor de lo mejor y es superprofesional pero demostramos que estamos a la altura y que se puede. Que los sueños se pueden hacer realidad y creo que es lo que nos debe movilizar’.
En lo personal, Chávez se mueve entre San Juan y La Rioja, donde estrenará departamento que ya había alquilado antes de irse a Marruecos: ‘Es una etapa nueva en mi vida. Alquilé allá pero San Juan es el epicentro de mis actividades. Es más ya me confirmaron desde el municipio que habrá una pista de tierra compactada para que empiecen a entrenar los chicos, A ellos hay que apuntarles y demostrarles que se puede. Que los sueños se hacen realidad dependiendo de lo que uno se sacrifique sin perder jamas la humildad y el respeto por todos’.
