En el suroeste de China se registró un fuerte sismo que ayer provocó 64 muertos, según medios estatales. A su vez, se registraron más de 160 heridos en el temblor de 5,7 grados de magnitud que sacudió ayer las provincias de Yunnan y Guizhou. Como consecuencia, hubo que evacuar al menos a 100.000 personas, lo que hace temer que aumente el número de víctimas.
Según el Ayuntamiento de la ciudad de Zhaotong, en Yunnan, en las cercanías del epicentro del sismo, el desastre natural afectó a 24 localidades. Se trata de un área con una densidad de población relativamente alta. Según el Ayuntamiento de Zhaotong, la mayoría de fallecidos se ha producido en la localidad de Yiliang, cerca de Luozehe, donde se detectó el epicentro del terremoto. Más de 20.000 familias han perdido sus hogares.
El terremoto se registró pasadas las 11.00 hora local en la zona fronteriza entre las provincias de Yunnan y Guizhou (suroeste), en concreto en los condados de Yiliang (Yunnan) y Weining (Guizhou). El sismo, cuyo epicentro se ubicó a unos 15 kilómetros del centro de Yiliang y tuvo una profundidad de 14 kilómetros, fue seguido de hasta 16 réplicas.
Según el alcalde de la aldea de Luozehe, Li Fuchun, “lo más difícil para las tareas de rescate es el llegar”. “Los caminos están bloqueados”, agregó, antes de indicar que será imposible avanzar una cifra aproximada de muertos hasta que los equipos no hayan llegado a las aldeas más afectadas. El director de la Oficina Sismológica de Yunnan, Huangfu Gang, indicó que las edificaciones en la zona, un área relativamente pobre, no estaban construidas para resistir un sismo de esta naturaleza.
Fuentes: Efe y Reuters