Aunque tiene un hijo con su mismo nombre y siempre le dijeron Carlitos (hoy técnico del joven equipo que presenta la Municipalidad de Zonda), a Carlos Roberto Escudero, campeón argentino de ruta en 1969, todos en Rivadavia también le decían Carlitos. Tenía 20 años de edad, cuando consiguió el título que ningún sanjuanino había podido lograr.
La coronación fue en General Roca, Río Negro, en épocas en que los Argentinos de Ruta se denominaban de Resistencia porque se corrían sobre 120 kilómetros contrarreloj.
Hoy, con 63 años muy bien llevados, Carlos sigue relacionado al ciclismo, acompaña siempre a su hijo en lo atinente a su función y ayer disfrutó, como lo hace desde 2001 con la carrera realizada en su honor.
Fue el encargado de premiar a Franco López y por un momento, volvió a su momento de esplendor. Le pidieron mil fotos, lo palmearon y saludaron muchos aficionados. Estaban los que lo vieron correr y otros que, por una cuestión de edad lo respetan por esa porción de historia que supo conseguir y sus mayores le contaron.
