El fuerte temporal de lluvia y granizo que afectó a La Rioja el fin de semana causó la muerte de otras dos personas, como consecuencia de la gran crecida de ríos y arroyos habitualmente de escaso caudal, con lo cual ya suman tres las víctimas fatales en esta provincia a causa del fenómeno meteorológico que también azotó a Santa Fe, donde un hombre de 24 años falleció electrocutado.

Rodrigo Quinteros, de 8 años, murió en la mañana de ayer cuando jugaba a la vera de un río del barrio La Sonámbula, una zona pobre de los suburbios de la capital, al caer al agua y aparentemente quedar enganchado en el fondo. El niño cayó y no volvió a la superficie, indicó el director de Seguridad de la Policía de La Rioja, Antonio Chumbita, quien precisó que aparentemente el pequeño se habría "atascado en un tacho" que estaba en el fondo del cauce.

La cantidad de agua que atraviesa la ciudad de La Rioja por un tajamar fue de tal envergadura que incluso levantó parte del pavimento de una obra que lleva adelante la municipalidad en el río.

La otra víctima fue identificada como Diego Emmanuel Olguín, de 19 años, quien fue arrastrado por la creciente mientras realizaba tareas rurales en una quebrada cercana al dique Los Sauces, a unos 15 kilómetros de esta Capital. El cuerpo de Olguín fue encontrado ayer a la tarde por personal de la Policía provincial y de Defensa Civil.