Con un casco, dos patines y varios protectores, los pequeños competidores del primer torneo internacional organizado en el flamante Patinódromo de Rawson, dieron ayer el inicio a las carreras de velocidad. Las mismas, que habían sido suspendidas el viernes por el tiempo que demandó el acto inaugural y los distintos espectáculos, tuvieron a corredores de alto profesionalismo que deleitaron con sus habilidades. Pero eso no fue todo ya que además de las promesas y de los audaces velocistas estuvieron presentes algunos veteranos que superaron los 70 años. En síntesis, más allá de lo deportivo, fue un show para toda la familia.

En la jornada de ayer estaban previstas sólo las pruebas de medio fondo. No obstante, se agregaron las de velocidad anuladas el día viernes. Las categorías más pequeñas, con niños de 4 y 5 años, fueron las encargadas de abrir el espectáculo en los 100 metros. Ordenaditos uno al lado del otro en la línea de largada, se ubicaban en la posición indicada (semiagachados, con un brazo adelante y otro atrás) y tras el silbato partían como “flechas”. Eso sí, varias veces hubo que volver a largar ya que la ansiedad por finalizar adelante produjo algunas salidas en falso. El público chileno, sin dudas la mayoría entre los presentes, fue el que más revuelo hizo en el patinódromo. Con banderas e instrumentos musicales se encargaron de ponerle un granito más de emoción a las carreras. Otros, en cambio, prefirieron alentar a sus compañeros y familiares más de cerca y corrieron a la par de los pequeños para que no aflojaran la velocidad. Pero como en todos los deportes individuales, el ganador es uno solo y las lágrimas por no terminar primero/a aparecieron temprano.

Ya con la pista iluminada por la poca luz solar, comenzaron las competencias más avanzadas: entre ellas los Juveniles (de 15 a 18 años) y los Adultos (de 19 a 29) en ambos sexos. Muchos quedaron admirados por las altas velocidades que supieron alcanzar. Aunque la mayoría de las veces predominó el buen nivel de algunos corredores que hicieron un poco de diferencia. Así, casi todos los finales fueron ajustados. Tanto en las pruebas de velocidad como en las de medio fondo. Estas últimas son similares a las primeras, aunque la diferencia se basa en que las de medio fondo poseen embalajes que otorgan puntos adicionales cada una vuelta y media.

Los Masters profesionales, donde se destacó el sanjuanino Oscar Contrera, también fueron un atractivo interesante. Es que la velocidad no varió demasiado con las anteriores dos divisiones y se disfrutó al máximo. Además, hubo carreras americanas con equipos mixtos. Ésta se asemeja a una posta, aunque los participantes dan varias vueltas intercambiando el orden.