Buenos Aires, 16 de febrero.- Timur, un tatuador de 24 años de edad y originario de Rusia, causó una gran controversia después de publicar fotos y un video de él mismo tatuando su gato, una esfinge sin pelo, a través de Internet.

Al parecer, Timur quería que su amado gato, Coco, tuviera un tatuaje similar al suyo en el pecho. Por eso no lo dudó. Anestesió al animal y lo tatuó. Orgulloso de su idea, grabó todo el proceso y tomó algunas fotos de la obra de arte y los publicó en su Facebook.

Si bien esto de tatuar animales no es una novedad, ante este nuevo caso las asociaciones protectoras de animales acusaron a Timur de crueldad, aunque el joven artista trabajó bajo la supervisión de un veterinario. Sin embargo, el proceso de curación es muy doloroso y si la pintura se metió en su sangre, podría enfermar gravemente e incluso morir.