"Vuelvo a actuar, vuelvo a hacer teatro luego de 6 años, tiempo que dediqué a diseños curriculares y demás gestiones concernientes al teatro pero en la educación formal. Volveré a maquillarme y a subir a escena con un grupo de valientes que confiaron en mí, justo el día en que se cumplen 20 años de la creación de mi primer Grupo de Teatro, el TOA. No puedo explicarles la felicidad que me embarga y quiero que sepan que ustedes, mis colegas, fueron siempre parte de mi historia por sus aportes críticos y por tantas funciones, Teatrinas y experiencias compartidas. Los abrazo y los espero, por si pueden venir a compartir mi alegría". Con estas palabras, Julio Mercado invitó a ver El anfitrión, la obra número 20 que dirige, la 24 que realiza con su elenco y que subirá a escena mañana, justo (como lo dijo) a 20 años de que empezó a caminar el Teatro del Oeste Argentino (TOA).

Fue el 19 de abril de 1995 (una semana después de que le informaran que habían aceptado su proyecto en la Alianza Francesa) cuando Julio Mercado comenzó a dictar sus talleres, de los cuales surgió la primera formación de este elenco teatral. La espera trágica, de Eduardo Pavlovsky, fue la obra con la que debutó en 1996 y que subió a escena 16 veces hasta 1997.

"La idea era hacer cursos de teatro que no solamente brindaran una formación orgánica en el ámbito dramático teatral, sino que, además, motivara en la toma de conciencia de la necesidad de más y mejor teatro en San Juan", expresó el director.

En su camino, el TOA transitó por distintas sedes (desde el Teatro Sarmiento a una casa del Barrio Palermo) y dio rienda a diferentes proyectos paralelos que anidaron en su seno, como el Instituto de Estudios Dramáticos y Teatrales (que crearon en 2002 junto a colegas de otras disciplinas), el teatro de cámara Carmen Peñaloza (2002) y la sala de cámara Berta de Abner (como bautizaron a su espacio en el Barrio Palermo, con motivo del 10mo aniversario del elenco en 1995, año en el que cumplieron sus 150 funciones). A lo largo de ese tiempo, también recibieron distinciones: Mención Especial al Alto Nivel Artístico de la Subsecretaría de Cultura en el marco de la Fiesta Provincial de Teatro 1996, selección en el Encuentro Regional de Teatro 2001 para la gira por el interior del país y la selección de El Rey se muere (declarada de interés cultural y con la que incluyeron un intérprete de leguaje de señas) para representar a la provincia en la VI Fiesta Regional del Teatro del Nuevo Cuyo.

Locanana, La Escalera, Serpientes y Escorpiones, Fin de Siglo, La Lección, Drama de mujeres de Pueblo, El Cepo, Tres palabras, Laotralasombra, Una mujer perfecta, Nunca actúes de árbol y El Rey se muere fueron algunos de los títulos que el TOA subió a escena. Después, más abocado a la tarea docente (fue convocado por el Ministerio de Educación de la Nación para diseñar los NAP de teatro; y presentó junto a la ya fallecida Nebita Alladio, directora del estudio Pavlova, el proyecto de Profesorado de Teatro); Mercado delegó los talleres en manos de su esposa, Amalia Baldovino, aunque sin producciones.

En 2012, el director retomó los talleres, esta vez en la Sociedad Israelita, que tras un tiempo destinado a miembros de la institución, se abrieron luego para toda la comunidad. Fue con este grupo que preparó Anfitrión, la obra que lo devuelve a las tablas (ver abajo), sin dejar de lado la dirección; y con la que el TOA celebra dos décadas amasando teatro en su cercano Oeste.