Tigres de México arribó ayer por la mañana a Buenos Aires para la disputa de la final revancha de la Copa Libertadores ante River, mañana en el estadio Monumental desde las 22, luego del empate 0-0 de la ida de la semana pasada en Monterrey.

La delegación del equipo mexicano aterrizó a las 7.30 en el aeropuerto internacional de Ezeiza y luego de los trámites de rutina se trasladó hasta el hotel de la zona de Puerto Madero, donde quedó concentrado.

Luego de descansar y almorzar, el plantel conducido por el brasileño Ricardo “Tuca” Ferretti se entrenó por primera vez en suelo argentino desde las 16 en el predio Casa Amarilla de Boca, precisamente el archirrival del equipo Millonario.

“Las finales se ganan. Será un lindo partido en un estadio bonito y ante un gran equipo. Este (el de mañana) no tiene nada que ver con la primera final ni con los encuentros de la fase de grupos”, manifestó el delantero brasileño Rafael Sobis en un breve contacto con la prensa antes de ingresar al hotel post arribo a Buenos Aires.

Los 22 futbolistas que tiene el director técnico Ferretti a disposición para la gran final de mañana son: los arqueros Nahuel Guzmán, Enrique Palos y Aaron Fernández.

Los defensores Israel Jiménez, Juninho, José Rivas, Antonio Briseño, Jorge Torres y Jorge Iván Estrada.

Los mediocampistas Egidio Arávelo Ríos, Guido Pizarro, Javier Aquino, Jürgen Damm, José Francisco Torres, Joffré Guerrón, Damián Alvarez, Jesús Dueñas, Manuel Viniegra y Edgar Lugo. Más los tres delanteros Enrique Esqueda, André Gignac y Rafael Sobis.