El cruce de opiniones entre la presidenta Cristina Fernández y su par de Francia, Nicolás Sarkozy en el G-20 por los planes de ajuste en el Viejo Continente para enfrentar la crisis de la zona euro, tuvo ayer nuevos ingredientes de uno y otro lado. Mientras, el canciller Héctor Timerman, aseguraba que Sarkozy "lo que está protegiendo es que los bancos franceses cobren los bonos soberanos emitidos por Grecia", la Unión europea reclamaba al Gobierno argentino que deje de "bloquear las importaciones de ese bloque".

"Lo que está protegiendo Sarkozy es que los bancos franceses cobren la deuda, porque los bancos franceses son los principales acreedores de la deuda griega", dijo Timerman en declaraciones a su llegada al aeroparque metropolitano Jorge Newbery como parte de la comitiva que acompañó a la Presidenta en su viaje a Canadá.

Según el canciller, Grecia tiene dos caminos: "o paga la deuda y se hacen los planes de ajuste o no se hacen los planes de ajuste y se reestructura la deuda", alternativa no apoyada por Sarkozy.

Cristina rechaza el ajuste como receta para reducir los déficit de los países de la zona euro, mientras Sarkozy lo apoya, al punto tal que ayer anunció su decisión de reducir los gastos del gobierno, (ver página 18), siguiendo los pasos de Grecia, España, Portugal, Irlanda, Italia y Gran Bretaña.

En el plenario de la cumbre del G-20, el domingo en Canadá, Cristina refutó a su par francés luego de que el mandatario defendiera las políticas de ajuste para revertir la crisis en la eurozona y afirmara que "América latina no sabía del hostigamiento que tenía el euro".

Al respecto, Timerman sostuvo que "si hay algo que Latinoamérica sabe y Argentina también es sobre ataques de especuladores" y añadió: "Si nos hubieran acompañado cuando Argentina sufrió esos ataques, tal vez ustedes no hubieran sido atacados".

Por su parte, el gobernador José Luis Gioja, que acompañó a la Presidenta a Canadá, remarcó el mensaje de Cristina.

La Presidenta relató "la experiencia argentina y sus resultados positivos" y remarcó "una política decidida en apoyo al trabajo y al empleo, que son las variables que más han sufrido cuando las crisis aparecen".

El titular de la cartera de Relaciones Exteriores concluyó sobre este tema que "se recibieron muy bien" las palabras de Cristina, quien en su respuesta a Sarkozy dijo, entre otras cosas, que "nosotros podemos dar cátedra de hostigamientos y de embargos".

El funcionario destacó, además, que "Argentina participó activamente del debate, de presidentes y jefes de Estado exponiendo la práctica, más allá de la teoría", en base a "lo que le pasó a la Argentina".

"Dijimos que nosotros no estamos hablando de teoría, estamos hablando de la práctica, esto es lo que le pasó a la Argentina por aplicar planes de ajustes y así es como salimos de la crisis económica, sin planes de ajuste. Nosotros creemos que no es el pueblo el que tiene que pagar los desbarajustes del sistema financiero", consignó el canciller en su contacto con la prensa.

Dejó claro que la posición argentina es que "los planes de ajuste no van a ayudar" y recordó que "se resolvió que distintos tipos de economías requieren distintos tipos de salidas a las crisis".