El contador Osvaldo Rebollo presentó ayer en la Inspección General de Personas Jurídicas el informe del estado patrimonial del Hospital Español y así, dio el último paso antes de convocar a los eventuales interesados en quedarse con el centro de salud. Según el documento, la entidad tiene un capital de 56,2 millones de pesos y deudas por 48,3 millones. El Estado es el único que hasta aquí que ha expresado su intención de quedarse con el nosocomio privado para que San Juan no pierda capacidad de atención a su población y dentro del pasivo que debería asumir, las obligaciones con la AFIP, las previsiones para juicios y los sueldos atrasados son los rubros de mayor peso.
El Español está en liquidación desde mayo por su crítica situación deficitaria y el principal objetivo del proceso es lograr que sea saneado y siga funcionando. Después de elevar el informe, resolución de Personas Jurídicas, Rebollo tiene ahora que abrir el proceso para recibir ofertas. “Calculo que será en unos 15 días más”, aseguró ayer el liquidador.
La determinación del estado económico y financiero del viejo hospital es clave ya que, para decidir si se presentan a la compulsa, es lo primero que consultarán los que tengan algún interés de administrarlo. Allí constan cuáles son sus bienes, el valor de cada uno, los ingresos ordinarios, los créditos a cobrar, los gastos operativos, los pagos comprometidos y la deuda desagregada que acumula. Calculadora en mano, toda esa información permitiría sacar conclusiones acerca de si es viable que continúe funcionando como un centro de salud.
De la documentación se desprende que el activo del nosocomio al 30 de abril de este año está conformado, entre otras cosas, por el inmueble, dinero en cuentas bancarias, insumos, medicamentos, equipamiento médico, créditos por prestaciones a obras sociales y alquileres de consultorios a profesionales. El bien de mayor valor es el edificio, que fue valuado por una inmobiliaria en algo más de 48 millones de pesos.
La contraparte es el pasivo. A la misma fecha, se cuentan deudas con empleados, impuestos nacionales y provinciales impagos, acreedores por prestaciones médicas y previsiones hechas para pagar gastos de distintos origen.
El desagregado indica que la deuda más importante del Español es con la AFIP, por un poco más de 22 millones de pesos en concepto de multas y un plan de pago. Además, le debe más de 1,7 millones a la Provincia por Ingresos Brutos y Sellos y 7,3 millones al personal.
El otro ítem importante del pasivo es el de Previsiones, que suma cerca de 12 millones de pesos. Ese monto incluye 2,6 millones reservados para pagar juicios de distinta índole que están en trámite y cerca de 4 millones para atender gastos de la liquidación. En el último rubro se cuentan futuras indemnizaciones para el caso de que el centro de salud pase efectivamente a la Provincia: si bien absorbería a todo el personal, los médicos que ya pertenecen a Salud Pública recibirían un monto de dinero por dejar de pertenecer al Español como una institución privada.
Uñac ya avisó que su voluntad es que el hospital quede para el Estado y los técnicos de Hacienda y Salud Pública se preparan ahora para a estudiar el informe del liquidador y ver cuáles son las alternativas para cancelar los 48 millones de deuda. Primero se pensó en convertirlo en un centro público de pediatría, pero la intención final del Gobierno es destinarlo a la atención de pacientes que las obras sociales suelen derivar al sector estatal.
Si no se presentaran oferentes, sea el Estado o cualquier privado, el Español casi quedaría encaminado a desaparecer. El liquidador debería realizar todos los bienes, para después pagarles a los acreedores.
