Con la victoria de Juan Martín del Potro, el suizo Roger Federer rompió la racha de cinco años de ganar este Gran Slam. Desde el 2004 que Federer se consagraba en el Abierto de Estados Unidos.
En cuanto a sus rivales, en el 2004 derrotó a Lleyton Hewitt, en el 2005 a Andre Agassi, en 2006 a Andy Roddick, en 2007 a Novak Djokovic y en el 2008 a Andy Murray. Por eso ayer, el helvético se perdió la oportunidad de ganar su sexto torneo.
El suizo, actual número uno del mundo, llegó a esta final como el favorito ya que es el máximo ganador de títulos de Grand Slam (15), los más importantes del circuito.
Del Potro interrumpió la trayectoria de la mejor raqueta de la historia del tenis mundial. Derribó a un grande que pretendía obtener su cuadragésima primera victoria. El suizo no perdía en el escenario estadounidense precisamente desde los octavos de final del 2003, también ante otro argentino, David Nalbandián.
Con esta derrota, Federer bajó los brazos y se alejó de la gloria y de más récords, aún pendientes de batir. Por ello queda con cuarenta victorias consecutivas, 2191 días sin conocer la derrota. A sólo un paso de los seis títulos consecutivos que no se alcanzan desde 1925, de la mano de Bill Tilden, quién fue el único que firmó aquella inigualable racha.
