Ya pasó casi una rueda. En 10 partidos, este modelo de Sportivo Desamparados no ha terminado de cuajar. El técnico Andrés Villafañe ya probó todos los sistemas, todos los nombres y todas las opciones que este plantel le ofrece. Empezó con dos líneas de cuatro y dos puntas. Ese sistema le duró las tres primeras fechas. Luego, cambió y pasó a jugar con dos líneas de cuatro, un enlace y un solo punta. Con ese modelo táctico empató en San Luis. Pero obligado por las circunstancias, Villafañe se decidió por jugar con línea de cuatro en el fondo, tres volantes, un enganche y dos puntas. Le sirvió para ganarle a Rivadavia de Lincoln pero no fue receta para ganar en Olavarría. Siguió insistiendo en ese modelo hasta que varió a la línea de tres atrás, con cuatro volantes, enganche y dos puntas. Le ganó a Cipolletti con ese sistema pero luego cayó en Mar del Plata. Ayer, contra un modesto Defensores de Belgrano, Sportivo empezó jugando con el modelo de la línea de tres en el fondo y en el primer tiempo sacó su ventaja ganadora pero en el complemento se desdibujó mal y terminó jugando con dos líneas de cuatro y dos puntas.
En este ciclo, el equipo con identidad propia no aparece aún en Sportivo Desamparados. En los nombres, parece ya haber encontrado a los defensores con la línea de tres que arman Oscar Sainz, Ariel Barth y Martín Bidal. El resto, está aún en una etapa de prueba. En el arco, arrancó con Mancinelli pero luego le dieron lugar a Gonzalo Gómez. Los dos están en un mismo nivel y se sabe que en un arquero es clave la continuidad. En la posición de enganche, el natural para el puesto es Julio Ibañez pero Silvio Prieto y Malandra están en condiciones de pelear ese lugar. Este Sportivo necesita consolidarse línea por línea y con toda una rueda encima ya es hora de que aparezca el equipo.
