El chofer del camión repartidor parece que no aguantaba más. La situación lo urgía, de modo que no tuvo otro remedio que detener el vehículo y bajarse a orinar al costado de una calle desolada de Zonda. Fue en esos instantes que, cuando menos lo esperaba, aparecieron por detrás dos ‘motochorros’ y los emboscaron a su compañero y a él. Los ladrones dejaron a los dos empleados cerca de unos matorrales, les quitaron los celulares, la llave del camión y, lo principal, se alzaron con alrededor de 35.000 pesos de la recaudación.
Este atraco se perpetró ayer cerca de las 18.30 sobre las calles Las Moras y Sarmiento, en uno de los accesos al poblado de Zonda, según fuentes policiales. Los dos repartidores de la firma Arturo Zorrilla Martínez volvían en un camión Ford Cargo de dejar bebidas gaseosas y cervezas en algunos negocios de ese departamento, explicaron.
En el vehículo viajaban el chofer Cristian Darío Blanquer (38) y su compañero Roberto Carlos Araya (36), señalaron las fuentes. Fue en ese trayecto, cuando salían de Zonda, que a Blanquer le dio apuro por orinar y decidió parar el vehículo, explicaron en la Policía. Se supone que ni se dio cuenta, pero los asaltantes en moto ya los venían siguiendo. Entonces, en el momento en que el chofer del camión descendió y caminó hacia unos matorrales, los dos ladrones aprovecharon la oportunidad para atacarlos. Los desconocidos llevaban cascos y armas de fuego, dijeron.
A Araya le ordenaron que bajara, de ahí lo llevaron junto al chofer y después les exigieron que entregaran los celulares y la llave del camión Ford. Solamente los amenazaron encañonándolos, aclararon; no hubo golpes ni los maniataron. Según las versiones, uno de los delincuentes se quedó a vigilarlos, mientras que el otro subió al camión y empezó a revisar el interior hasta que encontró el dinero de la recaudación, una suma que ascendería a los 35.000 pesos.
Tomado el botín, los asaltantes pidieron a sus víctimas que no se movieran y emprendieron la fuga. Los repartidores saben que huyeron en una moto, pero no alcanzaron a ver qué tipo de rodado era. Minutos más tarde pidieron ayuda a la Seccional 15ta y a la empresa, además porque no podían mover el camión.
