Buenos Aires, 29 de octubre.- La tormenta golpeó con fuerza desde anoche a la Ciudad, que tuvo que soportar hasta esta mañana 136 milímetros de lluvia, más de lo que en promedio llueve en todo el mes. Esa situación dejó decenas de calles anegadas y provocó problemas para viajar, con servicios de subtes y trenes con demoras, complicaciones en el tránsito, vuelos demorados en los aeropuertos y cortes de luz en varios barrios del área metropolitana. Cerca del mediodía, los servicios comenzaron a normalizarse, pero la situación en el Conurbano todavía era muy complicada, con calles que seguían inundadas y más de 500 evacuados.
La peor situación se vivía en el partido de Marcos Paz, debido a las inundaciones. El secretario de Control Urbano de la Comuna, Raúl Pigliacampo, sostuvo que se trata de "alrededor de 120 familias evacuadas", lo que totaliza "unas 500 personas". También había problemas en Luján donde el río está subiendo 20 centímetros por hora. Allí, el Municipio ya preparó un centro de evacuados, ya que temen que el fenómeno pueda ser como la inundación de 2012, cuando el agua llegó a la Basílica. También había complicaciones en Berazategui, donde cayeron postes de luz, en Laferrere, y en Tigre por la crecida de los ríos, donde hubo que evacuar a 130 estudiantes que participaban de una salida.
Esta mañana, las líneas B, C y D del subte y el Premetro circularon con retrasos, y la estación San Pedrito, de la línea A se encontraba cerrada por anegamiento. A media mañana, la situación en el subte mejoró y solo quedaban con demoras las líneas C y D. Además, algunos ramales de trenes también circularon con problemas, como el Urquiza, con servicio limitado a Campo de Mayo y los ramales Suárez y Mitre del ferrocarril Mitre. La situación iba mejorando de a poco.
Moverse en auto por los accesos y la Ciudad tampoco fue sencillo. En la zona del Puente Pueyrredón, las avenida Yrigoyen y Mitre estaban muy complicadas, lo mismo que Figueroa Alcorta y Tagle. Otro problema para el tránsito era la caída de árboles, como ocurrió en Cabrera y Pringles, en las avenidas Jujuy y San Juan o Villafañe e Isabel La Católica, de Barracas.
Los problemas también afectaron al servicio de colectivos, en especial a líneas que llegan o salen hacia el Conurbano, que tuvieron servicios más espaciados de costumbre. La situación, de todas formas, tanto para el tránsito como para el transporte, se vio aliviada porque hubo gente que se quedó en sus casas.
Los problemas se extendieron al Aeroparque y Ezeiza, donde desde anoche se registraron demoras, cancelaciones de vuelos y otros que fueron desviados a distintas aeropuertos cercanos. Unos de los problemas fue que por la intensa tormenta eléctrica muchos de los aviones no pudieron recargar combustible. Esta mañana hubo momentos de tensión en el sector interno de embarques por las prolongadas demoras.
El Servicio Meteorológico Nacional mantenía la alerta vigente por "tormentas fuertes, abundante caída de agua y probable caída de granizo" para una amplia zona, que incluye a la ciudad de Buenos Aires, el conurbano bonaerense, La Plata y otras ciudades del interior de la provincia de Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos.
Vecinos de Ramos Mejía, Castelar, Ituzaingó y La Plata reportaron, publicando imágenes en Twitter, vientos fuertes, voladuras de techos de chapa y caída de árboles y cableado de tendido eléctrico.
La tormenta también provocó cortes de luz en los barrios de Palermo, Villa Crespo, Almagro, Caballito y Parque Chacabuco, y los mismo ocurrió en distintas zonas del Conurbano.
