Hace casi 50 años sólo había dos huellas para ingresar a la Villa Aurora, en Ullum. Hoy, las calles pavimentadas e iluminadas muestran el progreso del lugar. Y en este avance, la Vecinal tuvo un papel clave. Con una bajísima cuota societaria de $1 lograron además, construir un salón en donde hoy funciona el centro de salud Alejandro Royón.
La Unión Vecinal de Villa Aurora fue fundada el 28 de mayo de 1965. Durante décadas sus socios se reunieron en las las casas porque no tenían sede propia. Fue recién en 1984 cuando pudieron comprar una propiedad luego de recaudar fondos con la venta de alimentos. Era una vieja casa de adobe que con los años se convirtió en un galpón que hoy se alquila hasta para casamientos. Pero el primer gran logro llegó en 1965 pues hicieron que máquinas de Vialidad abrieran las calles internas de la villa. El pavimento y la iluminación llegó en 1973.
"Recuerdo que hacíamos capacitaciones y a través de eso nos daban subsidios. Había gente de la comisión que no sabía ni leer ni escribir y como soy maestra copiaba o les redactaba los trabajos en las capacitaciones\’, dijo Silvia Asís, actual presidenta de la vecinal. Estos subsidios sirvieron para construir un salón que sirvió para reemplazar la casa de adobe y allí abrieron un centro de salud. Pero en 2011, Salud Pública decidió cerrar la salita porque habían abierto un CIC a pocas cuadras donde había atención médica. Y por una movida de la vecinal mediante la que hizo una presentación en la Defensoría del Pueblos y juntó firmas, el centro de salud no se movió. En la actualidad están ampliando esta construcción.
A todo esto se sumó que esta unión vecinal tuvo un papel importante en la llegada de la telefonía al barrio. \’No recuerdo bien en qué año pero hicimos que trajeran el primer teléfono público\’, contó Hugo Monla, que fue presidente de la vecinal hace unos años. El hombre recordó que esto fue una revolución para los niños. +Estaban todos amontonados y peleándose por tocar el tubo del teléfono, porque nunca habían visto uno\’, dijo Monla.
La vecinal también luchó para que ingresaran los colectivos a la villa y que construyeran una escuela cercana porque los niños tenían que movilizarse muchos kilómetros. Hoy, en el lugar se encuentra una escuela de Educación Especial.
