La imagen de la entrada al lugar arrancó los primeros comentarios de asombro, sobre todo de las bellezas que llegaron de otras provincias. Las gamelas en miniatura y las canastas de mimbres realizadas artesanalmente por gente de la zona repletas de productos netamente locales, eran una fiesta para la vista y el paladar. Esto se vio ayer, en el Almuerzo Real que organizó el municipio de Caucete para agasajar a las reinas de diferentes regiones del país que llegaron a disfrutar de la Fiesta Nacional de la Uva y el Vino. El evento fue en el predio de la ex bodega Yanzón y con un verdadero sentir localista.

Hasta las reinas se tentaron de tomar los grandes y brillosos granos de cereza, una de las principales uvas cultivadas en Caucete, que colgaban de las pequeñas gamelas. Y de probar los dulces y conservas preparadas en forma casera por artesanos cauceteros que usaron frutas y verduras cultivados en el departamento para elaborarlas. Lo pudieron hacer, pero después de terminado el almuerzo. Cada una de las reinas se llevó estos productos de regalo, ya que fueron preparados para entregar como souvenir del Almuerzo Real.

Pero ese no fue el único regalo para quienes participaron del evento. Entre los presentes se sorteó un cuadro de Claudio Domínguez, un artista caucetero que, por primera vez, participa con sus obras en la Fiesta Nacional de la Uva y el Vino.

A las 13 en punto, los mozos comenzaron a servir las mesas, donde también se destacaron los productos locales como los vinos de Casa Montes, una de las bodegas importantes de Caucete. También hubo danza y baile para animar el evento, todo a cargo de artistas de esas tierras.