Según la Policía, uno de los malvivientes ingresó al local, amenazó a las cuatro víctimas y las obligó a tirarse al piso. Sin más obstáculos, el asaltante tomó 3.000 pesos, 2 celulares y una notebook y antes de escapar lanzó un tiro que terminó impactando en una madera.

El asalto ocurrió el viernes a las 23 en ‘Comidas Ariel’, una empresa de catering y eventos ubicada en calle Caseros y Cereceto, en Concepción, Capital. Un empleado de la firma se limitó a confirmar el hecho y a mostrar dónde dio el balazo. Fuentes policiales informaron que Ariel Rosales (44), el propietario, tenía la puerta abierta del negocio y estaba por cerrar cuando fue sorprendido por uno de los motochorros mientras miraba televisión. El ladrón encañonó al dueño y también a su mujer, Vanesa Balmaceda, y a dos empleados. Después los hizo tirar al piso y aprovechó para tomar 3.000 pesos de la recaudación, los celulares de Rosales y la computadora.

En la Policía dijeron que cuando el asaltante se retiraba del lugar cargando en unos de sus brazos el botín efectuó un disparo. Una vez en la calle, escapó en la moto con su cómplice. Ayer, los policías de la Comisaría 2da buscaban alguna pista que permita individualizar a los autores.