A diferencia de la amplia ventaja lograda a nivel provincial por el Frente para la Victoria de la mano del gobernador José Luis Gioja, las elecciones en los departamentos dejaron como saldo el triunfo del Frente Unión Producción y Trabajo, encabezado por Roberto Basualdo, en 4 distritos: Angaco, Santa Lucía, Ullum y Zonda. Y estuvo cerca de sumar otro más, Valle Fértil, donde al final se impuso el oficialismo por un estrecho margen.
Con estos datos el basualdismo equipara los resultados obtenidos en los comicios del 2003, cuando también conquistó 4 municipios, que fueron Calingasta, con Adolfo Ibazeta; Valle Fértil de la mano de Angel Carrizo; Jáchal con Franklin Sánchez y, al igual que ahora, Santa Lucía, donde triunfó Vicente Mut.
El mapa político departamental actual consigna que el único municipio que está en manos de la oposición es Rawson, donde está a cargo de la Intendencia el ibarrista Gustavo Rojas, pero que a partir de diciembre deberá ceder el lugar al hermano menor del Gobernador, el actual diputado nacional Juan Carlos Gioja. La pérdida del bastión ibarrista significa un serio revés a las aspiraciones de consolidar su capital político para el diputado nacional Mauricio Ibarra.
Por lo que significa Santa Lucía, uno de los departamentos más importantes del Gran San Juan, quizás el triunfo más destacado sea el de Marcelo Orrego, al actual presidente del Partido Producción y Trabajo, frente a Aníbal Fuentes, que peleaba la reelección. Pese a los esfuerzos del oficialismo por retener el departamento, el Frente para la Victoria no logró imponerse y anoche Fuentes reconoció la derrota. En el entorno del jefe comunal atribuyeron los resultados a que el aparato justicialista no respaldó al jefe comunal y a que incluso el diputado departamental, Javier Ruiz, no lo acompañó en la campaña y de hecho obtuvo un mejor resultado que su compañero de fórmula.
En Angaco el que logró imponerse fue el actual concejal basualdista José Castro, quien desplazó al postulante del oficialismo, el diputado provincial Omar Blanco. En este departamento la etapa previa al acto comicial vino complicada e incluso con acusaciones al actual Intendente de origen bloquista, Víctor Fernández, de no haber apoyado al oficialismo. En los últimos meses en Angaco hubo polémica por el reparto de las viviendas y por un intento del Intendente de salir a cobrar las deudas por tasas municipales durante los preparativos para los comicios.
Ullum, el departamento en el que apostaba a volver al cargo de intendente Jorge Agapito Gil, que actualmente ocupa una banca en la Cámara de Diputados de la provincia, no logró el objetivo porque el triunfo quedó en mano del basualdista Daniel Albarracín.
Se trata de un ex funcionario del gobierno municipal porque fue secretario de Hacienda del actual intendente Alfredo Ortíz. En las filas oficialistas atribuyeron la derrota al desgaste sufrido por Gil después de dos períodos como jefe comunal y otros dos como legislador provincial. También pesó que el dirigente está procesado por malversación de fondos públicos y con su causa próxima a ser elevada a juicio.
El cuarto municipio en el que triunfó el basualdismo fue Zonda, donde el gobierno municipal quedó en manos de César Monla, un dirigente que actualmente se desempeña en la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses). Se impuso a Teresita Infante, esposa del actual intendente Francisco Porra. El jefe comunal no integraba la lista de candidatos, pero había manifestado su anhelo de integrar el equipo de trabajo de su mujer, tentativamente en el área de Obras Públicas.
En Valle Fértil, el que estuvo cerca de repetir las elecciones del 2003 fue Angel Carrizo, pero por un estrecho margen logró la reelección Francisco ‘Pancho‘ Elizondo. El cierre fue con acusaciones cruzadas por la poca diferencia de votos y hasta hubo un corte de luz en una escuela cuando se realizaba el escrutinio de las mesas.
En el resto de los departamentos no hubo mayores sorpresas porque, de acuerdo a lo que fueron las primarias del 14 de agosto, se impuso el oficialismo.
En Capital, Marcelo Lima es el primer intendente desde la reforma constitucional de 1986, cuando el cargo se convirtió en electivo, en lograr la reelección. Y en Pocito, después de los gobiernos de ‘Coco‘ Uñac, ya fallecido, padre de Rubén y Sergio, será la primera vez que ese apellido no estará en la Intendencia. El sucesor será el actual diputado Fabio Aballay.
