Era cuestión de segundos. Al parecer, el motociclista quería rebasar a una persona en bicicleta. Y lo estaba haciendo, sólo que aparentemente no miró para atrás. En eso que se abría, recibió la violenta embestida de un viejo colectivo, que atropelló como venía a la moto y marcó el final de sus días para el conductor. No fue únicamente el golpe o la caída lo que lo mató, además lo arrolló estando en el suelo. Su mujer, que lo acompañaba, se salvó por centímetros.
El corto viaje desde la localidad de Mar del Plata -cerca de Villa Mercedes- al centro de Jáchal, fue una tragedia para Juan Florencio Mallea, de 41 años, que acabó tirado y sin vida sobre la ruta 491 ayer por la tarde. También lo fue para su mujer, Gladys Muñoz, de 42, que sufrió una crisis nervios al ver a su marido muerto y tuvo que ser internada en el Hospital San Roque. El médico Esteban Banga señaló que la señora apenas tenía unos raspones y golpes leves, pero debieron internarla porque estaba muy shockeada.
El matrimonio iba en una moto Gilera 110cc. a la villa cabecera del departamento a realizar unos trámites. Venían desde el Norte por calle Eugenio Flores hasta que cruzaron la rotonda, en la zona llamada Las Colonias, a 4 kilómetros del centro. La pareja siguió con su moto por la ruta 491 -continuación de calle Eugenio Flores-, pero a 100 metros de la rotonda tuvo el accidente, señalaron en la Seccional 21ra.
Eran las 17.50. La versión policial indica que Mallea habría intentado rebasar a un ciclista. Entonces, aparentemente, se abrió hacia su costado izquierdo para pasarlo, explicaron las fuentes. En la maniobra, no observó que por detrás venía el colectivo Mercedes Benz -conducido por Jorge Ricardo Alvarez, de 51 años- de la Escuela Agrotécnica Manuel Belgrano, informó la Policía. No traía pasaje, volvía de dejar a un grupo de estudiantes.
El chofer habría dicho a la policía que el motociclista se le atravesó por delante y no pudo frenar ni esquivarlo. Fue así que se llevó por delante a la moto con la pareja. Gladys Muñoz, fue lanzada hacia un costado de la calle. No así Juan Mallea, que fue despedido metros adelante, sobre el mismo carril, y ahí fue arrollado nuevamente por el micro. Eso le provocó la muerte en el acto, a pesar de que llevaba casco.
