Verlo caminar, mover sus cortos brazos y sus garras afiladas, hace que se retroceda unos 230 millones de años. Aunque es de silicona y se ve que es una marioneta, el enorme dinosaurio parece real. Se llama Román y es una marioneta de 5 metros de largo y casi 2 de alto, que será una de las estrellas que lucirá el Ministerio de Turismo, durante la Feria y Exposición Temática, en el Parque de Mayo. Esta mascota, que tiene el fin de promocionar a la provincia por todo el país, será una de las atracciones de la Fiesta Nacional del Sol, desde el 24 de febrero hasta el 28 inclusive. Es que, dijeron que lo llevarán al cierre, en el Autódromo El Zonda Eduardo Copello.

Ayer fue presentado en sociedad. Como si fuera un animal domesticado paseó por la peatonal Maestro de América y fue furor entre los niños que caminaban por la zona. No fue sólo la atracción de los más pequeños, hasta algunos turistas que estaban conociendo la Casa de Sarmiento, salieron para ver quién rugía en la calle. Es que el animal, además de moverse y caminar, tiene sonido.

El mini espectáculo y la majestuosidad del Frenguellisaurus Ischigualastensis, el depredador más grande que habitó Ischigualasto, fueron inevitables.

Atado con una enorme cadena, Román saludó a la gente, mientras que Josefina Romero, su paseadora (la chica es profesora de Educación Física y es quien anima el espectáculo), contó algunos detalles de su tamaño, forma de alimentación y cómo vivía. Así, entre las risas y los que se animaron a acariciarlo, los niños no pudieron salir de su asombro. Valentín Avelín, de 4 años, fue el primero que se acercó a tocarlo y con un poco de temor pasó rozando los enormes dientes, que son hechos de acrilato autocurable (el mismo que se utiliza para las prótesis humanas).

El dinosaurio estará todas las noches en el Parque y pretenden llevarlo a otras provincias para promocionar el dinoturismo. ‘Queremos que esté unos días en el Obelisco‘, dijo Dante Elizondo, ministro de Turismo. Mientras que sus creadores explicaron que la marioneta pesa más de 30 kilos y posee movimiento en la cabeza por medio de un mecanismo de acción a través de cables guiados por el operador. Esta persona se ubica en el interior del animal donde un arnés le sirve de soporte para poder manejarlo.