Dos agentes de la Policía provincial y un gendarme con destino en Salta fueron apresados el último miércoles sospechados de traficar y vender cocaína en Capital, Chimbas y Jáchal. Además, secuestraron unos 160 g de esa droga y cayeron 12 civiles, informaron ayer fuentes judiciales.
Los policías presos son los agentes Pablo Manrique (Subcomisaría Cipolletti) y Juan Pablo D’Agostino (Regional Noroeste). El gendarme es Milton Páez, con destino en Aguaray, un localidad salteña que limita con Bolivia. ¿Por qué cayeron? fue a raíz de las escuchas telefónicas ordenadas por el juez Leopoldo Rago Gallo a Gendarmería y que permitieron la captura de 5 policías provinciales y 2 civiles, el pasado 28 de abril. Según las fuentes, en algunos de esos audios se detecta que el agente Manrique tenía contactos con David ‘Thiago’ Castillo, uno de los presuntos narcos que cayó en abril y que fue excarcelado ayer. Desde allí, hubo una investigación paralela en la que surgieron los nombres de los 3 efectivos.
Así, establecieron que Páez mandaría por enésima vez una encomienda con droga a San Juan y Gendarmería montó un operativo simultáneo en San Juan y Salta. Los policías sanjuaninos lo recibieron aquí en la firma ‘Andesmar’ (Manrique estaba uniformado) y era una caja que pesaba 22 kg: adentro había un ladrillo y tierra mezclada con guano que tenía unas 15 ‘tizas’ de cocaína. Entre los civiles apresados, aparece un tal Darío Lucero, quien mantenía contacto con Manrique: le avisaba cuando no estaban los controles de Gendarmería en Jáchal y luego distribuía la droga. Por si fuera poco, el agente también tendría vinculación a un asalto de $50.000 a una pareja de Santa Lucía, dijeron fuentes judiciales.