Las imágenes son contundentes: exactamente a las 19,25 del último domingo el guardia ingresa a las oficinas de la empresa, mira la pequeña caja de seguridad sobre un escritorio, pasa al baño, regresa del sanitario y vuelve a mirar la caja. Se detiene, mira al techo, toma el objeto de su tentación (adentro habían 30.000 pesos, cheques y documentos), lo sacude cerca de su oído y lo guarda bajo su campera. Parecía el golpe perfecto, pero el sospechoso cometió un error que resultó clave para esclarecer el caso: cuando mira al techo, se supone que pretende ponerse a salvo de lo cree una cámara, pero lo que observó no era el aparato que de todos modos existía y grabó cada instante del golpe desde otro lugar y sin que el custodio lo sospechara, dijeron ayer fuentes ligadas a la investigación.
Ayer en la siesta, los policías de la seccional 18va. de Albardón al mando del comisario inspector Eduardo Albarracín, terminaron de confirmar que no cabía otra posibilidad que sospechar de Ricardo Olivera Nuñez (27) como autor de ese hurto en la firma "Terra Logística S.A., Maxiklak S.A. y otros UTE" apostada en un amplio predio al costado Oeste de la ruta 40, en Campo Afuera, Albardón, en el que los guardias tienen acceso a las ofinas, dijeron las fuentes. El círculo de sospechas se cerró sobre ese custodio privado de la firma "El Guardián", porque en su casa de La Bebida, en Rivadavia, encontraron alrededor de 7.000 pesos y recibos que había en el interior de la caja sustraída. Ayer se investigaba qué hizo el empleado con el resto del dinero y los cheques sustraídos.
El hurto cometido por alguien contratado para evitar ilícitos fue descubierto por responsables de la empresa el martes en la mañana. Ayer trascendió que el encargado y los empleados de esa firma habían salido el sábado en la tarde de trabajar y recién volvieron el martes en la mañana. Entonces descubrieron que faltaba esa caja con los 30.000 pesos que se usan a diario para gastos internos y otros pagos, precisaron las fuentes. Ahi fue que al revisar el video se toparon con la secuencia precisa de cómo se perdió la plata y quién podía tenerla. El caso será resuelto por el juez en lo Correccional Eduardo Gil.