Sabían que iba a suceder, pero todo había sido planeado con tan poca anticipación que nadie imaginaba semejante respuesta: con el tránsito cortado en plena Avenida Libertador, a metros de Paula de Sarmiento, más de un millar de personas esperaba el paso del cortejo fúnebre con los restos de Norma Beatriz Buberman de Guida, ex directora de la Escuela Modelo de San Juan, quien falleció el martes pasado casi al mediodía.
La escena era impresionante. Había casi 700 alumnos de la primaria y la secundaria del establecimiento educativo, con los uniformes puestos, formados, en silencio conmovedor y acompañados casi todos por sus padres. El aire solemne del homenaje a la educadora se completaba con las Banderas de ceremonias de ambos niveles educativos, portadas por sus abanderados. A ellos se había agregado además el Cuerpo de Bandera del Colegio Inglés, para despedir a Betty, tal como todos llamaban a la docente.
El homenaje duró menos de 20 minutos, pero bastó para arrancarles las lágrimas a todos. Chicos, padres y hasta ex alumnos que habían ido al encuentro se emocionaron mientras recitaban la Oración a la Bandera que Betty institucionalizó en la escuela. Y el llanto en muchos ex compañeros de trabajo y amigos de la educadora se volvió incontenible cuando la actual directora de la primaria, Susana Cabrera de Roda, leyó unas palabras de despedida, inspiradas en la misma oración. Ese breve texto había sido escrito por Cabrera la noche del martes, en la cocina de la cochería, mientras acompañaba los restos de su colega y amiga.
Betty Buberman había ejercido la docencia durante cuatro décadas. Como directora de la Modelo marcó una huella inolvidable, al punto que todos la definían como el "alma madre" de la institución, incluso ya jubilada.
