Volvió a encenderse el alerta hídrica en la provincia: Los pronósticos de nieve en la cordillera sanjuanina indican que este invierno volverá a haber poca nieve -menos que en un año normal- y que por lo tanto, será tan "pobre" de agua como los dos últimos años. "El comportamiento climático pronosticado responde al fenómeno de La Niña (ver infografía), que es el responsable de los últimos años secos que ha tenido la provincia y en general, la región Cuyana", aseguró a DIARIO DE CUYO Rubén Bejeran, experto en Ciencias de la Atmósfera y especialista en Climatología de la Universidad de Buenos Aires.

La noticia es mala para la provincia y la pone frente a un escenario preocupante, porque acarreará inevitablemente una sequía más pronunciada, en un escenario aún más complejo que los anteriores años, porque los tres embalses de agua que tiene la provincia de San Juan -Quebrada de Ullum, Los Caracoles y Cuesta del Viento- están con los niveles históricos más bajos registrados. Además, el actual caudal que trae el Río San Juan no es alentador para que se recuperen y lleguen a niveles medianamente óptimos, de acuerdo a los escasos 24,1 m3/s que ostentan los aforos.

"Hay consenso entre los diferentes centros de estudios del mundo de que la precipitación (nívea) va a ser baja en los meses de junio, julio e inclusive agosto que es donde se dan los grandes episodios. Estamos frente a una condición similar a la que se dio en las últimas temporadas, donde en la zona San Juan fue poca la nieve que se acumuló y que luego trajo derrames muy escasos y un problema de sequía o escasez manifiesta", explicó Bejeran.

Por su parte, en la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la provincia aún no manejan datos de acumulación de nieve, ya que como es costumbre sólo realizan el pronóstico hídrico anual luego de los "cateos" -mediciones de acumulación de nieve en cordillera- que se ejecutan entre los meses de agosto y septiembre en 5 puestos claves: Calderón, Pantanosa, Pachón, Teatinos y Sardina. Eso sí, los dos últimos pronósticos fueron fallidos y el derrame estuvo casi un 35% por debajo del calculado al inicio de la temporada. Hasta el momento, el único dato certero es que se sabe que hubo un solo temporal fuerte en cordillera y que fue esta última semana, con 40 centímetros de nieve acumulada, según las primeras estimaciones.


¿Última temporada con poca nieve?

Las probabilidades de que se prolongue el fenómeno de La Niña más allá del mes de septiembre son muy bajas -hay un 57% de chances que finalice para esa época, según la información que maneja el Servicio Meteorológico Nacional-, por lo tanto se afianza la posibilidad de que este invierno sea el último "pobre". De ser así, la provincia de San Juan dejaría atrás dos campañas con derrames muy bajos: En la 2009-2010, 1.372 Hm3 y la 2010-2011, que arrojó 1.059 Hm3. Si bien no se puede estimar cuanto será lo "normal" en el invierno 2012, se sabe que lo ideal es "al menos" orillar volúmenes que de piso superen los 1.500 Hm3 para así no tener zozobras en el verano.

"Esto es cíclico, periódico, diría que hasta normal que existan momentos mejores y peores dentro de lo que son los efectos que producen los fenómenos climáticos, más en un mundo donde la mano del hombre colabora mucho para que esto se dé. Luego de 3 campañas con poca precipitación nívea, van a entrar (San Juan) en un proceso de normalidad que va a llevar a tener inviernos con la nieve suficiente", explicó Bejeran.