Con la obertura de El murciélago, de Johann Strauss Jr., comenzó el concierto gratuito que la Filarmónica de Munich dio ayer en el Obelisco porteño, bajo la batuta del director indio Zubin Mehta. Tal como ocurrió meses atrás con Daniel Barenboim, una multitud disfrutó del majestuoso espectáculo.