El Campeonato Brasilero de fútbol tuvo ayer una jornada trágica, más allá de la consagración del Cruzeiro cuando restan cuatro fechas para el cierre. Es que en uno de los partidos que definió el descenso de un club histórico de ese país como el Vasco da Gama, se produjo una terrible gresca en la tribuna contra los hinchas del Atlético Paranaense, dejando el saldo al cierre de esta edición de un muerto y tres heridos graves. La pelea en la tribuna se dio durante varios minutos y provocó la suspensión del encuentro durante una hora. La violencia entre las parcialidades provocó, incluso, el llanto de varios futbolistas que observaban incrédulos desde el campo de juego.
Uno de los motivos de semejante pelea fue que el club Paranaense no contrató seguridad privada para separar de mejor manera sus hinchas de los de Vasco.
En tanto, el otro equipo que jugará el próximo año en la segunda división será el Fluminense, club que el año pasado se había coronado campeón. El Fluminense, uno de los clubes con más hinchas de Brasil, fue castigado con el descenso pese a la victoria por 1-2 en la cancha del Bahía debido a que dependía de otros resultados y el Coritiba ganó por 0-1 en su visita al Sao Paulo.