River no pudo doblegar ayer a Central en su visita a Rosario y terminó igualando 1-1 el encuentro de la segunda fecha del campeonato. El local finalizó el encuentro con 10 hombres por la expulsión, a los 36 del segundo tiempo, de Paulo Ferrari.
River se puso en ventaja prácticamente desde el comienzo. La oportunidad comenzó en un córner en favor de Central, pero el millonario salió de contraataque con un pelotazo desde el fondo, Lanzini habilitó a Teo Gutiérrez, el de Barranquilla hizo una pared con Fernando Cavenaghi y cedió a Lanzini a la izquierda para que el volante definiera con precisión para el 1-0. Con jugadas aisladas, como un cabezazo de Luna a los 8, o una llegada de Ferrari que chocó con Lanzini, Central mostró que tenía mucho ímpetu, pero pocas ideas.
La visita manejó la pelota con buen tino, aunque se diluyó en los metros finales sin llegar otra vez con peligro hasta que a los 28 llegó el empate para el equipo de Miguel Angel Russo. Hernán Encina armó la pared con Jesús Méndez y luego envió el centro pasado para la llegada de Luna, quien cabeceó hacia abajo, ante una pasiva defensa millonaria.
El período decisivo mostró un bajo nivel de ambos equipos, no hubo situaciones claras durante la primera media hora de juego y sólo sobre el final se vieron algunas acciones de riesgo. Central intentó a los 34 con un remate de fuera del área de Federico Carrizo, que se fue lejos por el segundo palo del arco defendido por Barovero. La expulsión de Ferrari, a los 36, tras ver la segunda tarjeta amarilla por una falta a Leonel Vangioni, no modificó el curso del partido, dado que el conjunto dirigido por el riojano no aprovechó la superioridad numérica. River recién tuvo una posibilidad clara a los 44 con una media vuelta de Carbonero por el segundo palo, que se fue muy desviada por arriba del arco. La igualdad terminó siendo justa en el Gigante de Arroyito.
